¿Qué es la fascia?

La fascia es ése órgano misterioso que últimamente parece estar en boca de tod@s, y que hasta hace muy poco tiempo no despertaba ningún interés científico o kinestésico…

Quizás te estés preguntando:

¿Es realmente la fascia tan importante? ¿O es esta otra tendencia de la que nadie se acordará pasados unos años?

Y, como yo sí creo en sus virtudes y de hecho las trabajo en clase hasta el punto de tener un estilo (Laboratorio de Posturas) dedicado en exclusiva a trabajar la liberación miofascial, voy a intentar no participar de este debate y limitarme a aportar los datos objetivos para que seas TÚ quien decida si el Trabajo Fascial es el adecuado PARA TI.

De modo que, de la manera más objetiva posible, paso a describir qué es la fascia y cuáles son las cualidades que la han puesto tan de moda entre atletas y modelos por igual.

LA FASCIA ES una expansión membranosa, en forma de lámina, formada por tejido conectivo fibroso y resistente, que envuelve como una sábana nuestros órganos, músculos, tendones y células y conecta todo nuestro cuerpo creando un conjunto.

La fascia se caracteriza por poseer tres cualidades únicas con un impacto muy notable en la calidad de nuestra movilidad: elasticidad, plasticidad y viscoelasticidad.

  1. Así, cuando trabajamos nuestra fascia, devolvemos a nuestro cuerpo la elasticidad natural que le permite moverse como una unidad en lugar de como una combinación de partes. Desde esta premisa, recuperando la elasticidad de la fascia,  mejoramos la calidad del movimiento, el equilibrio, la sincronización, la elasticidad de las fibras, lo que puede tener un impacto muy positivo en el desempeño atlético de deportistas profesionales.

2. La fascia es un tejido altamente inteligente y con elevadísima capacidad de respuesta, responsable en gran medida de nuestras reacciones reflejas. Esta estructura está poblada de receptores y terminaciones nerviosas que, cuando están en contacto con adherencias, tejido cicatrizal, o tejido acortado, pueden provocar dolor y podrían ser las causantes del 80% de las molestias de espalda, con causa desconocida. Esta misma riqueza de receptores y terminaciones nerviosas otorgan a este tejido su segunda cualidad: la plasticidad, ya que este tejido tiene una insólita capacidad regeneradora que mantiene siempre «jóvenes» los tejidos que envuelve y es responsable de la «juventud» de nuestra movilidad.

3. Por último, la fascia es una parte viva compuesta por colágeno, elastina y diferentes células, además de un elevado nivel de agua, lo que aporta a este tejido su tercera cualidad; la viscoelasticidad. Esta cualidad se podría traducir en términos laicos como la «capacidad de rebote» de nuestros músculos, ligamentos y tendones. En otras palabras, la capacidad de nuestros tejidos blandos de recuperar su estructura en reposo, tras la elongación o contracción causada por el movimiento. Cuanto menos tiempo tarde el tejido en volver a su estructura en reposo, menor será el tiempo de desgaste que sufra y por tanto mejor será su salud y la calidad del movimiento.

Si, tras esta breve explicación, te animas a explorar el Trabajo Fascial, hay dos aspectos importantes que debes tener en cuenta :

  • Al contrario del trabajo muscular, el trabajo fascial NO debe ser realizado a diario, ya que la fascia tarda 72 horas en recuperarse tras el trabajo.

 

  • Las cualidades de la fascia (elasticidad, plasticidad y viscoelasticidad) tardan también un tiempo muy diferente al muscular en mostrar cambio notable. El Trabajo Fascial y de Liberación Miofascial requiere constancia y, aunque posiblemente nos sus efectos desde el primer día, tarda entre 18 meses y dos años en asentar los resultados de la transformación.

Si tienes cualquier duda, quieres saber más, o quieres compartir tu experiencia,

¡no te vayas sin dejarnos un comentario!

flying wings

Entrada por: Anna Pairaló

Formación en Yoga

No hay comentarios

Escribe un Comentario

Este sitio está protegido por reCAPTCHA y se aplican la política de privacidad y los términos de servicio de Google.